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"Si el Gobierno decidiera que dadas las circunstancias convendría sincerarse, le sería forzoso desembolsar vaya a saber cuántos miles de millones de dólares a los sufridos tenedores de bonos –entre ellos los fondos jubilatorios– puesto que, como nos recordó hace poco Randazzo, “por cada punto que aumenta” la inflación “hay que pagar 1.800 millones de pesos de deuda”. Pues bien, si la diferencia entre la inflación kirchnerista y la auténtica ya supera los 20 puntos, lo adeudado se acercaría a los 12.000 millones de dólares. Puede que el Gobierno se sienta con derecho a felicitarse por haber ahorrado tanta plata subestimando groseramente la inflación, pero desde el punto de vista de las víctimas de la maniobra se habrá tratado de una estafa intolerable. ¿Podría el Gobierno sincerar la inflación hacia delante pero no hacía atrás? Incluso si el país se resignara a un ardid de tal tipo por suponerla la menos mala disponible, los perjuicios ya ocasionados seguirán distorsionando la economía."
(Revista Noticias, 6-9-08).
En Conclusión:
Opción A: Sincerar los indices y pagar hasta el ultimo peso es imposible: No da la Caja.
Opción B: No sincerar los indices poco tiempo mas, también es Imposible: No da la Economía.
Por lo tanto, salvo que haya un cambio total de personas y de ideas, la Sra. CK es INVIABLE hasta el 2011.
hola Julio, te agradeceré si colocás los nombres completos en tus comentarios y escritos, de los personajes a los que hacés alusión ya que con lo cambiante que es la situación de los funcionarios públicos y de otros participantes en la política, nos falta información y actualizaciones para comprender a quién te estás refiriendo, pues hasta podemos desconocer a qué época pertenece el personaje en cuestión.
ResponderEliminarLo obvio no trasunta, sólo los que mantienen conversaciones habituales pueden hablar de obviedades.
OK gracias
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